Contraloria investiga, la descolmatación de Santa Mónica nuca existió

Tras el escándalo destapado por la página Cajabamba, Perú, sobre la descolmatación de la quebrada Santa Mónica que nunca se llevó a cabo, los valientes vecinos confirmaron ayer ante la Contraloría una verdad contundente: jamás vieron maquinaria alguna realizando los trabajos que supuestamente se ejecutaron. Peor aún, el representante enviado por la Municipalidad Provincial de Cajabamba (MPC) no supo explicar cómo existía un expediente técnico con fotografías que no correspondían al lugar en cuestión.
Las preguntas golpean con fuerza: ¿se rompió el hilo por el lado más débil para encubrir a los responsables? ¿Dónde está el dinero que se le pagó a la empresa encargada? ¿Qué hizo esa empresa con los fondos? Es imperativo convocar al gerente de dicha compañía para que rinda cuentas claras y sin evasivas.
¿Y dónde están las rondas campesinas y urbanas frente a este descarado acto de corrupción? Si pedían pruebas, ahí tienen el testimonio irrefutable de los vecinos. ¿Dónde están el señor Anticona, el señor Atanacio y el señor Juanelo? Su silencio es ensordecedor, como si estuvieran en modo “chi cheñol”, evadiendo toda responsabilidad.
No olvidemos que, según una reciente encuesta, el 96% de la población considera que Juan Pérez Campos tiene pleno conocimiento del uso indebido que se le dio al dinero de esta descolmatación fantasma. La verdad está a la vista; ahora falta que los culpables enfrenten las consecuencias.